.jpg)
Me iba a poner a escribir a la vuelta de Bra, pero entre lo cansado que estaba después del partido y el lío que sigue habiendo aquí lo he pospuesto. Pero hoy que estaba un rato sin hacer nada (después de fregar los platos) pues me he puesto para saludaros y contaros como sigue la vida por estas latitudes.
El partido estuvo bien, lo único que en España me quejaba de lo pesados que se hacían los fines de semana en los que hacíamos 600Km el sábado, dormíamos, jugábamos y volvíamos y aquí resulta que viajamos en furgonetas, pero no está mal del todo, vamos en furgonetas de 9 personas y volvemos, jugamos casi siempre los sábados por la tarde. Este fin de semana estuvimos en el pueblo este cerca de Torino, y pasado mañana jugamos en Bolonia contra la Roma. La verdad es que se hace raro que nuestro equipo recién ascendido le toque las dos primeras jornadas contra el campeón y el subcampeón de la liga del año pasado pero, la verdad, me decepcionó bastante la el nivel de juego, dado que el campeón de liga no jugaba demasiado, nos ganaron 5-1, pero a diferencia de lo que muestra el resultado, en cuanto a juego el partido no fue muy desigual, lo único que aquí la organización no saben lo que es, y así es un poco difícil jugar, pero acabé contento. Empecé el partido en el banquillo, pero a los 10 minutos salí de delantero, perdí dos bolas y pensé estás liándola… me sacaron y al minuto volví a entrar por un lateral que se estaba muriendo y en este sitio, que sí conozco más ya era otra cosa, la gente me decía: Luis, tienes un buen golpeo, y me quedaba pensando, ya lo sé joder, lo que pasa es que jugar en un campo que parece un bancal de patatas es complicado, pero en un Astroturf y con un palo bien la cosa cambia sustancialmente, al final jugué más de medio partido y no estuvo bien, pero para ser el primero me quedé satisfecho, y parece que a ellos le gustó como juego. Está el problema de que somos 6 extranjeros, y en la liga italiana solo pueden jugar 3 cada partido, y resulta que los dos que estaban aquí Stas y Cliff, son de los mejores del equipo (internacionales Ruso y Keniano) con lo cual va a ser un poco difícil, pero yo creo que se quedaron convencidos, esta semana veremos si juego o qué…
Al menos ya tengo mi bolsa, que menudo show, llegó el martes, y como no había nadie en la casa al que llegaba dejaron el papel de que ya había llegado, y el miércoles que si había gente no sé que pasó, y me dijo mi padre que ya habían enviado el aviso de devolución, a lo que me enfadé bastante, pero las cosas en Italia parece que es normal que funcionen así de bien, con lo que me tocó coger una bici prestada (la mía está sin un freno y con una rueda pinchada) e irme al final del pueblo a un polígono industrial a por ella, aunque eso, ya está, y luego nos íbamos a un pueblo aquí al lado llamado Cesenatico, y el grupo de españoles llegamos hora y pico tarde, con lo cual no encontramos a los demás, pero nos paseamos por allí, además a la vuelta cogimos el último autobús que venía aquí, y casi lo perdemos, lo que sí habría sido divertido para los de relaciones internacionales, creo que nos van a odiar.
De los Erasmus hoy ya llega la última persona, aquí nosotros ya estamos todos juntos muchas veces, esta semana en concreto hemos estado comiendo y cenando los españoles y algún allegado juntos y con una semana que llevamos aquí ya estamos como si nos conociéramos de hace un montón de tiempo. Entre nosotros estamos Dani, Jorge y yo por el lado masculino y Covi, Rosa, Silvia, Elena, Neus, Isa, Eli y Nuria por el femenino, muy majos todos, luego ya nos pelearemos, pero ahora nos llevamos todos muy bien y los meetings son bastante divertidos, le tengo especial aprecio a Dani y a Covi, seguramente porque son los primeros que llegaron y son con los que más tiempo he pasado, pero ya tengo cosas que agradecer prácticamente a todos. Entre las anécdotas en este piso en el que estoy viviendo temporalmente ayer aparecieron la matrícula de una furgoneta y un cartel de “Paso para peatones y bicicletas conducidas a mano” de las obras de la calle principal, no diré quién lo trajo, no vaya a ser que la policía o los carabinieri lean mi blog y alguno acabe detenido…
Sigo sin casa, aunque las chicas de aquí se están portando genial y me están dejando dormir aquí, habrá que agradecérselo de alguna manera, aunque sea con una tarta y montones de amor, dado que dinero es complicado.
Voy a echar de menos un montón a Ewa, que se irá en breve, me ha hecho muchísima compañía este tiempo que llevo aquí, además es supersimpática y siempre ayuda con todo lo que puede. Mide como 1,90m. pero es bastante tímida, así que cuando viene a pedir algo (en inglés) en plan niña pequeña es supergraciosa, como veis todo en Ewa es súper- pero como me contaba Celia, cuando estás fuera todo es diferente y hasta el detalle más pequeño significa un montón y lo aprecias especialmente.
Me voy a ir a hacer la comida y a prepararme la bolsa para esta tarde, luego como tengo viajecito a Bolonia sigo.
Besos.
Que hay de nuevo viejos!
No sé porqué esta manera de empezar, pero aquí nada tiene un porqué, me ha venido así de primeras, que grande es Bugs Bunny…
Un día más se acaba, éste por lo menos con algo de deporte, porque llevábamos desde el lunes de fiesta y mañana y pasado me han dicho que hay sendas superfiestas, y es que se están tomando enserio esto de la welcome week, y de vez en cuando hay que eliminar toxinas.
Los entrenamientos parecen de juveniles, conducir bolas, recepciones de derecho, de revés, aunque son cosas que nunca viene mal entrenar, lo que espero es que hagamos en un futuro entrenamientos más de adultos con tácticas de juego y esas cosas, de todas formas me voy encontrando cada vez más a gusto, además ahora que ya tengo mis palos, mis zapas, mis espinilleras, MI BUCAL, pues mucho mejor, me voy habituando a esto y ya empiezo a jugar un poco como antes, es normal que estuviera raro, este año no he hecho pretemporada y antes de venir había tocado palo y bola un día, con lo cual estoy aún en rodaje, el único problema es que conforme me encuentro mejor y me van saliendo las cosas me va pareciendo que el nivel del equipo en general va bajando, pero bueno… mañana entrenamiento otra vez, el sábado partido contra Roma dei sisti y el domingo me han dicho que si quiero jugar también con el equipo de la Serie B, el segundo equipo, que está en la tercera liga de aquí, y ya que estamos empezando pues vamos a ver que tal, pero si el sábado pasado no resultaba difícil la SerieB va a ser un cachondeo, pero como lo importante es jugar, pues bien está, me estoy acordando ahora de que he visto la nueva página web del club, ya no sólo somos un club serio sino que además estamos informatizados, esto es la bomba, a ver si en volver tengo sitio en el equipo, ahora como jugador en vez de cómo entrenador, Jose Luis Villar, el retorno =)
Y ahora llego a “casa” y no tengo casa, desgraciadamente como existe este problema tengo que dormir de prestado y ayer no hubo más remedio que dormir en la cama de Rosa, qué le vamos a hacer, como esto siga así creo que lo que voy a hacer es no alquilar piso y conformarme con dormir con mujeres varias cada noche, o con alguna en concreto que se deje… (cuando alguna lea esto me van a caer una de collejas…) La cosa es que aquí me tienen como si fuera un mujeriego, y pienso que si eso fuera verdad no me dejarían meterme así en camas ajenas, pero a ver que pasa (papás, no os escandalicéis, que ya que escribo así de continuo lo hago para todo el mundo, espero que mis opiniones no hieran la sensibilidad de nadie, de todas formas procuraré utilizar un lenguaje respetuoso y educado, sólo diré mierda y joder para hablar de los arbitrajes italianos y de la administración nacional en general).
El otro día hice una tortilla francesa con patata por en medio y hoy voy a hacer otro intento a ver si a la segunda sale ya tortilla de patata, si no seguiremos intentándolo, la verdad es que cocinar aquí es un poco raro porque los ingredientes cambian un poco y los sabores también, tendré que acostumbrarme, por lo pronto las lentejas fueron una bazofia, el cocido no estuvo mal, igual que la paella y la pasta buena (que he hecho dos días espaguetis y uno gnocchis) ¿qué comeré mañana? Prácticamente nunca había tenido el problema de decidir que voy a comer y hacer la comida, me debo de estar haciendo mayor.
Y mañana (si nada lo impide) voy a ver mi futuro alojamiento, a ver con qué me sorprenden. El único problema es que pagando la fianza y el mes de octubre me quedo sin dinero definitivamente, y mañana hace que llevo aquí dos semanas, no está mal… para empezar, el dinero me ha durado la mitad de lo que debería, a ver si el mes que viene me dura tres semanas y ya para noviembre consigo llegar a fin de mes, que si no me voy a quedar delgaducho, Elena ya se ha propuesto que este año yo engorde 4 Kg, a ver si lo consigue y me convierto en un hombre grande y fuerte.
Me despido, que cada post que cuelgo se vuelve kilométrico, pero es que aquí son muchas las cosas que pasan, esto debe de empezar a parecerse a la vida real (al menos como simulacro).
Besos a las mujeres, familia, amigos y mariquitas y abrazos para esos y todos los demás.
Por cierto, se me han quitado las ganas de recibir más paquetes después de lo de ayer, pero cuando tenga mi dirección nueva os la pondré aquí que cartas si que me gustan recibir. Para mis papás, en el próximo envío, necesito:
Mi MP4 con mi música
El USB de 8 gigas con los datos que me faltaron por traerme
Un paquetito de Ñora frita picada para mis paellas de pecado (aquí no hay ñora)
Colorante alimenticio (porque si no me voy a arruinar a base de poner azafrán)
Un bote de ColaCao (Por favoooooooooooooor…)
Parches para la bici (que mi bici sigue pinchada e ir a pata es un fastidio)
Fotos, cartas, regalos… o cualquier otra cosa que os apetezca enviarme y que me hará especial ilusión
Os echo de menos, a la gente y a mi almohada de lana, que aquí parece que tampoco tienen de eso. Así que os invito una vez más a venir a verme y ya que estáis podéis traérmela, así me hará triple ilusión, la de veros, la de que hagáis el esfuerzo de venir y la de que me traigáis mi almohada.
Más besos…
Jose
|
Iba andando de la facultad a la estación y me he ido acordando de cosas que me he dejado en el tintero en el anterior post, por eso pensaba que se me olvidaba algo… Y como tengo una hora de tren hasta llegar a Bologna Centrale, pues voy a entretenerme durante el viaje continuando mi carta de antes. Sé que es larga, pero como he pasado una semana sin conexión a Internet y justo era la primera que estaba aquí tengo muchas cosas que contar, y ya que soy pobre para llamar por teléfono y decirlas en persona, sobretodo a la familia, que me dicen que me echan de menos y habrá que tenerlos al día de las nuevas que por aquí se van sucediendo.
Primo di tutti, il mio numero de telefono italiano è il 3280036914 con el prefijo +39 o 0039 si se llama desde el extranjero, si me llamáis os agradecería que lo hicierais a éste número, ya que con el otro tengo que pagar un dineral cada vez que me llaman y ya os digo que soy un poco pobre, normalmente (aún no tengo problema de no tener dinero para comer) si me llamáis al otro también lo cojo, pero conforme se van dando las cosas puede que el otro lo meta en una caja y lo tire al río, porque no puedo gastar de la manera que lo estoy haciendo esta semana.
Os pongo un poco en situación con respecto a la que va a ser mi ciudad durante el próximo año. Cesena es una ciudad de unos 90.000 habitantes situada en el centro de Italia, en la Emilia Romagna, a unos 80 km al este de Bolonia. Aunque no es pequeña la densidad de población no es muy grande, por lo que no da la impresión de ser más grande que San Vicente, así que aquí estamos como en un pueblo.
La ciudad tiene su encanto, el casco histórico mantiene casi toda la muralla, y tiene un castillo y una biblioteca del siglo XV, tampoco sé mucho de todo esto dado que aún no he ido de turista a recorrer la ciudad, pero no está mal.
Aquí mucha gente va en bicicleta, las distancias no son muy grandes, pero en bici estás en un momento en cualquier lado y además así no contaminamos, los primeros días acaba sudando y con el culo dolorido, pero ahora ya me voy acostumbrando, la verdad es que siempre he querido ir en bicicleta a los sitios, así que esta es una buena escusa para empezar a hacerlo. Además los autobuses son eléctricos, cosa que me piace molto.
Algún día hace sol, pero aquí ya tenemos clima otoñal. Me han dicho que no es siempre así, pero durante toda la semana está lloviendo y para mí hace frío, hoy Valentina, una de las inquilinas del piso, que ha llegado hoy, decía que el frío aún no ha llegado, con lo cual me da, que aunque no llegaremos a temperaturas extremadamente bajas me voy a cagar de frío, ya que el río Savio pasa por la ciudad con lo cual el clima es húmedo y el frío se te mete en el alma como en mi “amada” tierra natal, esto unido a que estamos más al norte y que en invierno va a haber muchos días de niebla da una incómoda apreciación del clima de aquí. Supongo que para la gente que viene del norte de Europa esto está bastante bien, pero yo ya echo un poco de menos el sol y el calor.
Debe ser cierto que el irse fuera hace que las personas se muestren de forma diferente, aquí no solo me tienen por alguien sociable, sino que ayer me tachaban de algo así como “seductor”, bendita ignorancia… Pero la verdad es que ya he conocido a un montón de gente. Luis vino a la estación el viernes y después nos fuimos al “Chiosco” a tomar unas birras y conocí a sus amigos, con los que ya he coincidido en varias ocasiones. Tommy, Dario, Lorenzo, Alex y Francesco, si no me olvido de nadie, entre algún otro, pero éstos son con los que más he estado, luego por mi piso temporal han pasado las polacas “María” y Ewa, que eran erasmus del año pasado que están por aquí de vacaciones, majísimas las dos y me han hecho mucha compañía (ya os contaba lo de mi sentimiento de soledad). El domingo creo que fue, fuimos, con la escusa de ver como estaba la habitación de una española que tiene que vivir con ellas (Luis se encarga de buscar alojamientos), a hacer vida social a casa de otras polacas que habían llegado unos días atrás, Agata e Isa, que viven con “Florin”, francesa, y muy majas, además de bonitas, ayer Isa se vino a la fiesta que dimos en casa, les falta venirse un par de veces con nosotros y soltarse, que están como un poco cohibidas. El lunes llegó Dani, y ayer Cova, que son de Madrid y van a estudiar conmigo, y con ellos, quizá por ser los primeros que hemos llegado, tenemos una relación ya mayor que con el resto de gente. Además de ellos el miércoles llegaron Christina, austríaca, y una chica alemana que no recuerdo su nombre (ambas hermosas también) y muy majas, que ayer bebían como el que más.
Como véis ya va llegando la gente, y la próxima semana llegarán unos cuantos más (faltan bastantes españoles) pero con esta gente es con quien he compartido la semana. Fue un poco raro llegar el primero, pero así me ha servido para conocer antes a la gente. También conocimos el lunes a otros amigos de Luis italianos, lo que pasa es que son demasiados nombres para mi neurona, con los que hemos estado un par de veces, y llevo enumeradas como 20 personas y no he contado a aquellos con los que solo he estado un rato porque esos no cuentan como conocidos. Me olvido de Camilo, de Bogotá, cuyas cervezas animaron bastante la fiesta de ayer.
Pues la fiesta se planteaba como una cena de amigos, el objetivo era realizar un encuentro multicultural que sirviera de toma de contacto. Yo hice una paella de pescado y Luis sangría para el bando español (debo decir que fue lo que más triunfó de la noche). Tommy preparó pasta y trajo con Francesco cerveza y Limoncello para el bando italiano (no quedaron en mal lugar, pero no llegaban a nuestro nivel, habrá que preguntarles que dicen). Christina hizo un postre austríaco llamado KaiserSm…. (algo muy difícil de pronunciar, como todo lo alemán y austríaco) y luego el resto de la gente fue haciendo colaboraciones en su mayor número en forma de bebida alcohólica, con lo que nos jutamos con vino blanco, tinto y espumoso italiano, cerveza polaca y 4 tipos de cerveza más, os podéis imaginar la castaña que llevábamos a las 4 de la mañana cuando acabamos la fiesta en un parque cerca de casa (la fiesta era en mi casa). En Spain son en mi campo, en Italia en mi casa… esto no puede seguir así, pero la fiesta fue muy muy divertida y allí se hablaba, castellano, italiano e inglés a partes iguales. Yo aunque entiendo muchas cosas del italiano no soy capaz de hablarlo, pero ayer con mi inglés patatero conseguí relacionarme con el mundo y ser bautizado como el SpainEnglish, que no es una mezcla de idiomas sino viene a ser algo así como “El español que habla inglés”. Con lo que espero que mi intención de “improve my english” para este año también se va dando poco a poco, ya que aunque en Italia no son dados a hablar en inglés la gente europea sí lo hace, con lo cual me permite relacionarme con el mundo en lugar de ser el tío que está escuchando toda la noche (como los primeros días) que no me disgusta, voy aprendiendo, pero te deja un poco limitado. Los amigos de Luis hablan castellano porque han estado de Erasmus en España, pero por norma general se dirigen hacia mi en Italiano, con lo cual puedo comunicarme con ellos, pero tampoco me paso el día hablando castellano, de hecho Luis también me habla en su italiano particular, pero me gusta esto, seguro que así aprendo italiano “presto”.
Hoy me voy a quedar con las ganas de ir a la fiesta de Rimini, pero bueno, me apetece jugar un montón, así que que cuenten conmigo ya para el primer partido de liga “mi piace molto” así también sigo conociendo a más gente y tengo también el grupo de la gente del hockey y hago un poco de deporte, que si no iba a volver a casa dentro de unos meses demasiado alcoholizado.
De la uni no puedo decir nada aún porque no hemos empezado, la semana que viene es la welcome week y creo que empezamos las clases, por ahora sólo he ido a la secretaría a hacer los papeles que indiquen que estoy aquí y para configurar la conexión wirless en mi portátil, pero la facultad de arquitectura no tiene mala pinta. Aquí no hay un campus como en Alicante sino que son edificios sueltos por medio de la ciudad, pero bueno, como es solo escuela de arquitectura pues tenemos aulas específicas para cada asignatura, plotters y demás, lo que está bastante bien, la semana que viene ya comentaré que tal el inicio de las clases.
Me despido ya, que estoy llegando a Bolonia, acabaré harto de estas sesiones de tren, porque son varios viajes Cesena-Bolonia a la semana. Tendré que aprovecharlos para hacer actividades varias como la de hoy…
Ciao.
Jose.
|
Buenas a todos,
Tras una semana por tierras italianas dispongo, por fin, de una hora para poder contaros cuantas cosas han pasado a lo largo de estos siete días, que no han sido pocas, ni todas hermosas. Y digo una hora porque a las 6 y 15 parte mi tren para Bologna para entrenar y preparar mi primer partido como jugador de hockey de la liga italiana, me voy a perder una gran fiesta esta noche, pero la de ayer compensa, así que mañana a Torino, a jugar contra el Bra.
Pero empiezo por el principio, y es que odio los trenes italianos, el avión llegó bien a Bérgamo y de allí en tren a Milano también, no me acordaba de lo grande que era la estación de Milán, o quizá es que ir con una mochila es mucho más cómodo que con dos maletas y ya empecé a notar el caos de las tierras italianas. Y de ahí me subí al tren dirección Cesena, las horas pasaban y a cada estación que llegábamos anunciaban que nuestro retraso era cada vez mayor, hasta que el premio vino en Bolonia, cuando el tren se detuvo y nos avisaron (solo en italiano, claro está) de que el tren tenía un problema e íbamos a estar detenidos por tiempo indeterminado, BIEN!!!! Luego nos enteramos de que dos vagones estaban rotos y que no sabían cuanto tiempo iban a tardar en arreglarlos o quitarlos, pero bueno, al final el retraso fue de hora y cuarto, lo que dado como funcionan las cosas aquí no es demasiado. Por suerte iba en el tren con mi portátil estudiando un curso de Italiano (Gracias Mire) y tenía una mujer muy maja al lado que se puso a ayudarme, y luego resultó que iba al mismo pueblo que yo con lo que pude tener mi primera toma de contacto con el idioma local, luego tuve la cabeza como un bombo de escuchar italiano de Romagna rápido y raro por todos lados, pero eso era de esperar, lo que no me imaginaba es que aquí prácticamente nadie fuera a hablar inglés, lo que se convierte en un piccolo problema, pero ya voy aprendiendo algo.
A la estación vino a recogerme Luis (en bicicleta), el chico que me ha ayudado con el alojamiento, y con tantas otras cosas aquí, la verdad es que tengo mucho que agradecerle y sólo llevo una semana, no me quiero imaginar cuando acabe el año que pasará. Pues llegamos al hotel, salimos a tomar algo y a la una me recogí porque estaba hecho polvo. El fin de semana fue tranquilo, fui conociendo a gente de aquí y fui tomando contacto con la ciudad. Lo peor fue cuando llegué al piso la primera noche que dormí allí, la casa en la que estoy viviendo temporalmente es fantástica, pero es una casa muy grande y durante casi toda la semana he estado allí solo, entonces llegar a un piso grande, en un país que no es el tuyo y donde no te entienden, solo y sin conexión a Internet… me entró una angustia, que no sé, la verdad es que nunca me había sentido tan solo en mi vida como esa noche, pero bueno, los principios siempre son difíciles, pero no lo había comprobado nunca.Y empezó la semana y con ella todo el lío de papeleo, organización y demás, la verdad es que aún me quedan cosas por hacer y me agobié bastante, el primer día no estaban en relaciones internacionales, luego como no tengo casa aún hacer todo está resultando un poco complicado, pero poco a poco va saliendo todo. De todas formas los agobios son varios, porque llevo una semana aquí y en cuanto pague la fianza del piso, el mes de octubre y la cuenta del banco me voy a quedar prácticamente sin dinero, y es que entre que aquí la vida es bastante cara y que al principio hay un montón de gastos extras no sé yo que voy a hacer a lo largo del mes que viene. La comida es carísima, y ahora que si comprar el teléfono italiano, champú, jabón, pasta de dientes y todo lo demás que no podía llevar en la maleta, un desastre la verdad. Además me he comprado una bici, a decir verdad aún no la he pagado, pero ya es mi bici. Se llama Conchi (como mi mamá) ese fue uno de los motivos de mi elección, tiene un millón de años y es una bici de paseo de mujer, pero es fantástica, ya me han dicho un par de veces que qué bici más “nice”, que tengo y si no fuera porque ya he roto el freno de delante y pinchado la rueda de detrás sería todo genial, pero bueno, el domingo cuando vuelva de jugar la arreglaré, y en cuanto la pinte un poco y la ponga a punto será una gran bicicleta, por ahora soy un desastre montando en bici, pero supongo que después de un año haciéndolo se me dará un poco mejor.
Del papeleo no voy a hablar porque si no voy a acabar enfadándome, basta decir, que: código fiscal, certificado de entrada en la universidad, cuenta del banco, alquiler del piso, etc muchas cosas y muy mal organizadas, y aún no he ido a hablar con la coordinadora de la universidad para ver que hago con las asignaturas de aquí, así que a ver que pasa.
La comida, quitando que es cara, bien. Ya me he hecho una bazofia de lentejas, un cocido (bueno) y una paella de pescado (que a la gente de la fiesta le gustó mucho) aunque no era muy allá, pero es raro. Estaba ayer haciendo el cocido, y es algo que en casa ya había hecho, pero aquí es diferente: Primero ir de aquí para allá buscando los ingredientes (en italiano) lo que no es fácil y luego el detalle de que aquí la comida ya no la haces porque tienes que hacerla un día concreto o porque te apetece, ya que si no haces tú la comida no te la hace nadie. Lo mismo pasa con la lavadora, he puesto ya dos. Y ayer me sentí mayor haciéndolo, al menos sé como se ponen (cosa que todos no pueden decirlo) pero aquí si no la pones tú, no llegan papá o mamá y la ponen así que esto empieza a ser ya como un simulacro de la vida real. De todas formas hoy estaba comiendo arroz caldoso del cocido de ayer y me sabía a gloria, y eso que nunca me ha gustado mucho comer las sobras, pero el hacer las cosas tú le otorga un valor añadido, además que estaba bueno, y como beneficio tengo en el congelador dos litros de caldo de cocido y uno de caldo de pescado con lo que ya casi tengo comida para toda la semana que viene.
En cuanto al equipo de hockey, me ofrecieron lo que les pedí y con ellos empecé el martes, el campo es un poco basura, y más ahora que en Sant Vicent tenemos nuestro nuevo y maravilloso campo, tienen uno de agua (sin agua) y uno de tierra (ambos con parches) a cada cual peor, pero supongo que todo será acostumbrarse, el martes la verdad me fui un poco decepcionado. Pegan unos palos horribles y técnicamente no son nada del otro mundo, pero son majos y seguro que en cuanto lleve un tiempo aquí también esto mejora. Quizá el problema fue porque el martes me dijeron que si podía venir ya que era la primera semana y les dije que sí, y a la vuelta me pasé 3 horas esperando el tren para hacer un trayecto de 55 minutos, con lo que llegué a casa, sin cenar y con un cabreo importante, pero el miércoles mejor, y hoy ya veremos, mañana tengo mi primer partido y aunque no tengo aún mi palo (juego con un TK fucsia) pues me voy adaptando.
Me despido ya que tengo que coger el tren, seguro se me han olvidado un millón de cosas que contar, como la fiesta de ayer, entre otras, pero ya os iré diciendo cosas. Poned algún comentario si queréis que explique algo, y si no en próximas entregas de esta historia trataré de poner las cosas que olvidé, y las nuevas.
Os echo de menos, y aunque no quiero volver a casa, si me gustaría poder abrazaros.
Ci vidiamo.
Jose
|
Ciao a tutti,
No hablo italiano aún, pero tiempo al tiempo. Esta entrada es solo para saludar a toda la gente de por ahí. Había pensado que crear un blog podría ser una buena manera de mantener a la spanish people y a algun@ que otro más informad@, así que a ello voy.
En breve tendréis noticias mías contando que ha pasado en esta primera caótica semana aquí. Os echo de menos.
Jose.
|
.jpg)
